Niños soldado: morirán sin haber vivido, se harán adultos sin haber sido niños.

 La realidad de los niños soldado, es una de las más crueles por las que puede pasar un niño. Historias que verdaderamente estremecen, son las que se han escrito en la vida de muchos niños. La realidad de la guerra, su crueldad, su sadismo, su destrucción...se ha convertido en el día a día de unas criaturas que deberían estar jugando, peleándose con sus hermanos, abrazando a su madre... Pero son los diablos birmanos, congoleños, de Europa de el este, de Sierra Leona, de Centro y Sudamérica los que les arrancan la vida en tan solo unos minutos. Les entregan un arma y el alma de satanás. La guerra hace el resto.

Fotógrafos como Kapuscinski o Gervasio Sánchez, nos acercan a la realidad de estos pobres niños desalmados y sin vida en el rostro. Niños que diariamente reciben más munición que comida, que son carne de cañón, que no saben que hacen en una guerra que no es suya.




Fotografía de Kapuscinski.

Breve reportaje fotográfico sobre los niños soldado: http://www.almamagazine.com/fotoreportaje-ninos_soldado-vergenza_mundial

Cuando la fotografía no basta

Gracias al fotoperiodismo, somos conscientes de la realidad de muchos conflictos que suceden en el mundo. Los fotógrafos que arriesgan sus vidas, nos acercan, gracias a sus instantáneas, a una realidad tan cruenta y lejana para nosotros.

Pero hay veces que la fotografía no basta, no es suficiente para retratar la realidad. Cuando esta a veces es mas cruel y dura de lo que un revelado pueda mostrar.

La guerra de Bosnia fue un conflicto de los años noventa que despertó el fantasma dormido de los grandes conflictos internacionales. La cobertura informativa nunca fue demasiado buena y los fotógrafos no tenían el respaldo que tienen ahora. Y aunque gracias a fotógrafos como Gervasio Sánchez, que se adentraron en la boca del lobo, para hacer ver a Europa y al mundo que el conflicto Bosnio no era un chiste, muchas veces las fotografías no terminaban de (aunque suene duro dicho así) estremecernos o de encogernos el corazón.
Ahí entra en juego el vídeo, el sonido...un medio capaz de llevarnos a Sarajevo mismo y hacernos oler los cuerpos putrefactos sobre las aceras, a ver llorar madres y soldados, a sentir el miedo en la carne...
Os dejo un pequeño vídeo que parece del informe semanal de TVE. Las imágenes son muy duras.